En esta ocasión, contamos con unos pacientes del mes muy especiales: Hugo y Alex. Su madre Anabel nos cuenta cómo está siendo el proceso de ortodoncia, desde dos puntos de vista. Debido a que cada uno lleva una ortodoncia distinta: Invisalign First y brackets.
¿Por qué te decidiste por tratamientos de ortodoncia distintos para tus hijos?
Me decidí por tratamientos diferentes, porque David me explicó que había salido una nueva ortodoncia para los niños: Invisalign First; me explicó y enseñó su proceso y la verdad es que me causó buena sensación, lo vi innovador y me pareció bastante cómodo para un niño, pensé que al ser un nuevo tratamiento sería mejor.
¿Has notado alguna diferencia entre la ortodoncia tradicional y la ortodoncia invisible?
Si, y mucho. He acertado en haber elegido la nueva ortodoncia invisible, estoy muy contenta con los resultados en todos los aspectos. Habiendo probado los dos tipos de ortodoncia, la tradicional y la invisible, he notado una diferencia enorme de una ortodoncia a otra.
Con la ortodoncia de brackets, para un niño, es mucho más incómoda y dolorosa. Les cuesta adaptarse para poder hablar bien, para comer y tragar saliva. Les salen bastantes llagas y heridas producidas por los hierros y, como no, las urgencias a la clínica porque se le rompe algún hierro del aparato. También, al realizarle el molde del aparato, es muy incómodo para los nenes porque se realiza con una pasta que les causa bastante angustia.
En cambio, con Invisalign, no me estoy enterando de nada, al nene le está siendo muy cómodo, no tiene dolores, no le salen llagas y se ha adaptado muy rápido a él. Es muy fácil de poner y quitar y para comer no tiene ningún problema porque se lo quita. Otra cosa que me ha gustado muchísimo de esta nueva ortodoncia invisible es que es higiénica porque cada semana se reemplazan los alineadores. Y para realizarle el molde del aparato no se enteran, porque solo les pasan una máquina que les escanea los dientes y ya está, no se enteran de nada.
Yo que he probado los dos tratamientos, el tradicional y el invisible, recomiendo sin duda el invisible porque para un nene es mucho mejor y cómodo en todos los aspectos.
¿Cuál de los dos es más cuidadoso con su ortodoncia?
La verdad que los dos nenes son bastante cuidadosos y responsables con su ortodoncia, mucho más de lo que me imaginaba.
¿Recomendarías estos tratamientos y la Clínica Carralero a tus amigos y familiares?
Sí, en los dos tratamientos están siendo muy buenos sus resultados, pero habiendo probado los dos recomendaría la ortodoncia invisible porque es mucho mejor que la tradicional en todos los aspectos, no les cuesta adaptarse a ella, no tienen dolores ni llagas, no hay roturas y es muy higiénica. Y da muy buen resultado en poco tiempo.
¿Qué destacarías de la Clínica Carralero?
Primero la amabilidad por parte de todo el equipo, también el tiempo de espera que es mínimo y eso con nenes es fundamental y sobre todo la innovación en sus tratamientos y equipos. Mis hijos están encantados de venir al dentista y eso es muy bonito. Y gracias al Pequeclub los nenes vienen ilusionados por conseguir los regalitos.
Ahora les toca el turno a los protagonistas de la historia: Hugo (lleva ortodoncia tradicional) y Alex (lleva Invisalign First).
¿Cómo eran vuestras sonrisas antes del tratamiento?
Hugo: Aparte de que no me gustaba, mordía al revés.
Alex: Llevaba las palas muy separadas y los dientes doblados.
¿Queríais utilizar ortodoncia?
Hugo: Sí, porque quería tener los dientes y la mordida bien.
Alex: No, porque no me gustaba llevar nada en los dientes y me parecía feo, pero ahora que lo llevo sí que me gusta porque es muy cómodo.
¿El tratamiento os está siendo cómodo?
Hugo: A veces, cuando me aprietan me duelen los dientes, me salen heridas y llagas. Me costó bastante adaptarme para comer, hablar y tragar saliva. Y lo peor era cuando me hacían el molde del aparato con las pasta.
Alex: Sí, porque es muy cómodo, no noto nada, como si no lo llevara y no me ha costado nada adaptarme.
¿Os gustan los progresos que habéis conseguido?
Hugo: Sí, porque ya muerdo muy bien y los dientes los tengo bien.
Alex: Sí, porque las palas ya se me han juntado y ya no tengo los dientes tan doblados.
¡Gracias a Anabel por confiarnos las sonrisas de tus hijos!