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Cristina Fuentes: He conseguido sonreír sin complejos.

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Las carillas de composite le han cambiado la vida a nuestra pacientes Cristina Fuentes. Ahora sonríe sin complejos, ha aumentado su autoestima y disfruta sonriendo a los clientes en su trabajo.

¿Cómo era tu sonrisa antes del tratamiento? ¿qué no te gustaba?

Antes del tratamiento tenía los dientes muy alineados por el reciente tratamiento de Invisalign, pero en cambio tenía un tono amarillento después de muchos años de malos hábitos. Además de pequeña me rompí las dos piezas delanteras y la reconstrucción había cambiado muchísimo de color.

¿Cómo conociste las Carillas de Composite?

Realmente, acudí a la clínica buscando opinión y consejo de profesionales. Me interesaba el tema de carillas sobretodo para las dos piezas delanteras y me decantaba por las Lumineers, pero después de hablar con David y contarle mis expectativas, llegamos a la conclusión que no sería la solución más acertada ya que hacía tiempo que quería blanquearme los dientes y perseguía un blanco nuclear para mis dientes.

Ahí es cuando conocí a María, y desde su cercanía y profesionalidad decidió enseñarme trabajos realizados con carillas de composite y explicarme en qué consistía los diseños de sonrisas que realizaban.

Sinceramente, cambió mi visión. ¡Quería probar de perfeccionar mi sonrisa! 

¿Cómo fue el tratamiento, complicado y doloroso o cómodo e indoloro?¿Cuánto tiempo duró el tratamiento?

Salí de la clínica con mi kit de blanqueamiento mixto y con cita con ese super genio de diseño de sonrisas que me había hablado María, el doctor Pablo Arenas.

Cuando finalicé el tiempo requerido de blanqueamiento, tuve cita con Pablo, realizamos las pruebas de mock up (si no recuerdo mal) pulimos últimos detalles y… ¡voilá! Una sonrisa perfecta relucía en mi boca a través de un espejo, mi respuesta fue rapidísima: ¡sí, sí, sí quiero! 

Fueron varias visitas de varias horas, aunque debo decir tengo piezas bastante grandes y decidí hacerme toda la boca. Horas de mucha atención y concentración, nada doloroso, algún día recuerdo haberme dormido en el sillón dental… y ¡me lo pasaba en grande con Pablo y María! Creo que nunca había tenido tantas ganas de volver al dentista.

¿Estás contenta con los resultados conseguidos?

Contenta es poco, estoy encantada. Me dejé aconsejar por ellos, me quitaron de la cabeza un poquito lo del blanco nuclear y optamos por algo más natural y acertaron. 

¿Cómo ha cambiado tu vida con tu nueva sonrisa?

Al principio me daba vergüenza porque soy muy tímida y sentía que la gente me miraba, es más, en el hotel donde trabajo había clientes que hacían referencia a mi sonrisa y yo me sonrojaba. He conseguido sonreír sin complejos, sin taparme la boca inconscientemente y con ello he aumentado mi autoestima.

Viviendo en Peñíscola,  ¿por qué decidiste tratarte en una clínica ubicada en Xàtiva?

Como comenté anteriormente, mi primera intención era otro tipo de tratamiento y encontré unas opiniones excelentes referentes a la Clínica Carralero, y como siempre he sido persona de irme a los mejores profesionales, pues a Xàtiva me fui.

¿Qué aspectos destacarías de la Clínica Carralero?

Por donde empezar…

Solo entrar por la puerta ya percibes esa serenidad, profesionalidad por todos y cada uno de los miembros del equipo. Al ir desde Peñiscola, siempre me facilitaron las visitas para aprovecharlas al máximo y así evitar más viajes. Siento que se volcaron todos conmigo. Pero debo destacar, ya que con ellos fue con quien tuve mucha más relación, Pablo y María…

Encantadores es poco, pacientes, divertidos, profesionales, atentos. Y, creo que jamás conocí a nadie tan perfeccionista con su trabajo como Pablo. Se vuelcan al 100% con sus pacientes. Por una parte, me dio un poco de pena acabar el tratamiento, jaja.

¿Has recomendado o recomendarías la clínica a familiares o amigos? ¿Por qué?

Por supuesto, lo he hecho y sigo haciendo a día de hoy. Porque no pueden recibir una atención mejor en ningún otro sitio como la que yo he recibido aquí.

 

¡¡Muchas gracias Cristina por tus palabras!!

 

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