La boca es la puerta de entrada de todos estos nutrientes que nuestro organismo necesita. Pero no siempre prestamos la atención al modo en que ingerimos esos alimentos que los contienen. Masticar bien es el primer paso para que nuestro sistema digestivo realice la digestión correctamente.
La masticación es un proceso complejo que implica mucho más que triturar los alimentos. Al masticar, esos alimentos adquieren la consistencia adecuada para que los nutrientes se puedan descomponer y el organismo los absorba con facilidad. Además, se genera saliva, que contiene tialina y amilasa, dos enzimas digestivas. Y masticando se están enviando órdenes al estómago para que genere ácido clorhídrico, imprescindible para descomponer las proteínas.
Todo ello da la idea de la enorme importancia que tiene masticar bien los alimentos. Pero no siempre lo hacemos. Los motivos son muy diferentes, pero el resultado es el mismo: ingerir los alimentos sin haberlos masticado bien puede tener consecuencias para la salud.
¿Qué impide masticar bien?
El consejo que siempre se da a la hora de comer es el de hacerlo con calma, sin prisas, masticando perfectamente cada porción de alimento que se lleva a la boca. Pero no siempre se hace así, una mala costumbre con un origen a veces muy distinto:
- Estrés: el ritmo de vida actual hace que en muchas ocasiones se reste parte de ese tiempo para comer para dedicarlo a otras cosas. El resultado es que se come con prisas, sin apenas masticar, lo que dificulta notablemente la digestión.
- Pérdida de piezas dentales: una mala higiene oral, patologías como la periodontitis o traumatismos pueden provocar la pérdida de uno o varios dientes. Reponerlos cuanto antes es imprescindible, puesto que es la única forma para masticar bien.
- Desgaste dental: no solo la ausencia de piezas, también el desgaste dental, bien por la edad bien por trastornos como el bruxismo, puede entorpecer la masticación.
- Maloclusiones y apiñamiento: en ambos casos, los dientes no se encuentran en la posición adecuada, lo que significa que el movimiento de la masticación tampoco será correcto.
- Respirar por la boca: es un hábito que puede derivar de ciertas patologías y que, en cualquier caso, impide el movimiento normal de la boca para masticar y obliga a comer más rápido.
- Trastornos mandibulares: la articulación temporomandibular es esencial en la masticación porque es la que permite ejercer esa fuerza imprescindible para triturar los alimentos con los dientes, de ahí que cualquier alteración en ella también pueda causar dificultades a la hora de masticar.
5 beneficios de masticar bien
De un modo u otro, todos esos motivos que pueden llevar a no masticar adecuadamente los alimentos se pueden prevenir o, al menos, tienen tratamiento. Los beneficios de tomar medidas al respecto son muchos:
- Mantener el peso: cuando se mastica bien, con calma, se tarda más en comer y se propicia una sensación de saciedad. En este sentido, no hay que olvidar que la obesidad es muy peligrosa para la salud y factor de riesgo en innumerables patologías.
- El organismo descompone mejor las grasas: algunas de esas enzimas que el organismo genera con la saliva al masticar son fundamentales para descomponer las grasas. Esto se traduce en una mejor deglución y un tránsito más ligero de los alimentos.
- Se facilita la digestión: masticar correctamente la comida hace que el sistema digestivo tenga que realizar menos esfuerzos para realizar su función. El resultado son digestiones mucho más ligeras.
- Se absorben mejor los nutrientes: triturar bien los alimentos es clave para que el organismo pueda descomponer las proteínas en esos aminoácidos imprescindibles para nuestro bienestar y metabolizar los nutrientes.
- Favorece la salud oral: esa saliva que genera nuestra boca al masticar es fundamental para eliminar restos de comida y para actuar contra las bacterias que atacan a los dientes.
La importancia de acudir al dentista
Muchos de esos factores que impiden masticar bien están relacionados con la salud dental. Por eso, es imprescindible acudir a tu dentista para que determine el tratamiento más adecuado. En algunos casos serán implantes dentales o coronas y, en otros, habrá que recurrir a la ortodoncia.
Pero algunas personas pueden requerir de un tratamiento muy diferente: la terapia miofuncional. Esta, mediante diferentes ejercicios, busca “reeducar” las rutinas y hábitos de cada paciente. Se trata de conseguir que la boca ejerza perfectamente esa función masticatoria alterada a causa de disfunciones orofaciales o desequilibrios musculares.
Masticar bien es un factor importante para el bienestar y la salud, por eso, debes cuidar tu boca. En Carralero Clínica Dental Avanzada somos especialistas en prevención dental, en tratamientos dentales como ortodoncia o implantes y en terapia miofuncional. Cuida tu salud cuidando tu boca, pide cita en nuestra clínica dental en Xàtiva.