La salud oral no se limita únicamente a la boca, es uno de los principales componentes de la salud en general, debido a que si nuestra boca tiene alguna afección, la salud general se verá afectada, nuestra digestión, e incluso nuestra autoestima, por ello debemos proporcionarle el cuidado adecuado a nuestra boca.
La conexión entre salud bucal y salud integral, cada vez es más fuerte. Diversos estudios han comprobado que una importante cantidad de problemas bucales, repercuten directa e indirectamente en la salud general de las personas.
Mantener una correcta salud dental, significa tener controladas las bacterias que se encuentran en la boca. Si esta situación ideal no se cumple, el resultado será que estas bacterias se desarrollen atacando directamente a la boca, provocando problemas dentales y convirtiéndola en el acceso perfecto hacia el torrente sanguíneo.
Las revisiones regulares que realizan los dentistas, podría ser el primer paso para detectar y diagnosticar un problema de salud integral.
Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), las dolencias bucodentales comparten factores de riesgo con las cuatro enfermedades crónicas más importantes -enfermedades cardiovasculares, cáncer, enfermedades respiratorias crónicas y diabetes- pues se ven favorecidas por las dietas poco sanas, el tabaquismo y el consumo de alcohol. Otro factor de riesgo es tener una higiene bucodental deficiente.
Para reducir el riesgo de sufrir algún tipo de enfermedad en un futuro, es recomendable cumplir ciertos aspectos básicos de salud bucodental, tales como:
- El cepillado diario (mínimo 2 veces al día).
- El enjuague bucal.
- El uso del hilo dental.
- Llevar una dieta equilibrada
- No fumar
Esta realidad deriva en una conclusión: la PREVENCIÓN es fundamental, para poder disfrutar de una mejor calidad de vida, así como para vivir más y mejor. Recuerda visitarnos al menos 2 veces al año.
Dr. David Carralero
-Coleg.2661-
